Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Se despejaron las dudas. El malagueño Jiménez Fortes estará finalmente en Las Fallas y no en la corrida de mayo donde sí estará David Mora, a quien no se le ha dado sitio en la feria incomprensiblemente.
Simón Casas ha planteado la feria con el protocolo tradicional. Al francés nada le ha afectado la contienda sevillana y ha aprovechado la corriente para dejar las estructuras de la feria como lleva haciéndose desde los tiempos de Manolete. Novilladas de bajo coste, corridas de tercerones, y las figuras, pero con salvedades que rayan la locura y que nada dicen del progreso al futuro de este negocio.
Bien por Román al que se le trata con corrección en una feria dónde rompió y nos llenó de ilusiones frescas.
Aceptable el cartel donde se anuncia a Fortes, por la ganadería de Fuente Ymbro, siempre apetecible, y por el espectáculo de Ferrera y la seriedad de Adame, un mejicano con proyección y proyecto.
Fandiño merece algo más. Colocado con El Cid y el emergente Escribano. Le falta una corrida en este serial y acartelado entre otras figuras, pues la concentración de estas pretendida por la empresa, además de empalagosa puede resultar aciaga para el futuro. Y si no véase el cartel del día del patrón San José. ¡Que agobio! Ponce, Morante, Juli, Manzanares.
Que las figuras, menos Talavante, estén a dos tardes, no es nada nuevo, ni novedoso. Es más, de hecho es loable. Lo novedoso es la incomprensible concentración de estos coletas en una tarde. ¿Apuesta valiente u órdago empresarial?
Ya se sabe que el productor no tiene miedo. En lo del Puerto sí le han temblado las piernas, pero en Valencia hace una apuesta hilarante que ojalá le salga bien.
Vista esta cartelería aún se espera más de Sevilla, por las circunstancias, pero la esperanza está abierta. Sevilla pudiera innovar. Valencia, no. Es más, se intuye una guerra soterradamente abierta en contra de los “grandes empresarios” y a favor de los “empresarios innovadores”, suponiendo que Casas, Cutiño, Entero, entre otros, sean empresarios innovadores, porque innovar, no quiere decir proyectarse en el presente para alcanzar el futuro. Quizás por eso no entiendo el cartel del mano a mano entre Castella y Perera, y me cuesta trabajo digerir el de la concentración.
En cualquier caso, bienvenidas Las Fallas, primera feria de las de primera españolas. Por lo menos, caminamos un año más, pese a lo que está cayendo ahí fuera.
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